La Semana Santa en Abancay, capital de la región Apurímac, se vive con fervor religioso y fervor popular. La Catedral de Abancay, ubicada en la Plaza de Armas, se convierte en el epicentro de una serie de eventos que conmemoran la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
Domingo de Ramos: La festividad inicia con la bendición de ramos en la Plaza de Armas, seguida por una procesión del Señor de Ramos por las calles de la ciudad. La celebración culmina con una misa en la Catedral.
Jueves Santo: Se celebra la Misa de la Cena del Señor, donde se recuerda la última cena de Jesús con sus apóstoles. El lavatorio de los pies simboliza el gesto de humildad de Jesús. Posteriormente, se realiza la procesión del Santísimo Sacramento por las calles aledañas a la Catedral.
Viernes Santo: Día de luto y recogimiento. Se celebra la Pasión del Señor con un Vía Crucis por las calles de la ciudad, meditando las últimas palabras de Jesús en la cruz. Se lleva a cabo el Descendimiento de la Cruz y la procesión del Santo Sepulcro, donde los fieles acompañan en silencio el cuerpo de Jesús.
Sábado Santo: Se celebra la Vigilia Pascual en la noche, donde se espera la resurrección de Jesús. Se bendice el fuego nuevo y se renuevan las promesas bautismales.
Domingo de Resurrección: Día de alegría y celebración. Se celebra la Misa de Pascua y se lleva a cabo la procesión del Señor Resucitado, donde los fieles acompañan con cantos y alegría la victoria de Jesús sobre la muerte.
Tradiciones:
Procesiones: Las procesiones son una de las principales tradiciones de la Semana Santa en Abancay. Las imágenes religiosas recorren las calles de la ciudad, acompañadas por bandas de música y fieles que portan velas y cirios.
Sermón de las Siete Palabras: El Viernes Santo se realiza el Sermón de las Siete Palabras, donde se meditan las últimas palabras de Jesús en la cruz.
Alfombras de flores: En algunas calles de la ciudad se elaboran alfombras de flores para el paso de las procesiones.
Asistir a las celebraciones religiosas en la Catedral de Abancay.
Participar en las procesiones.
Visitar las iglesias y capillas de la ciudad.
Probar la gastronomía típica de la Semana Santa.
Respetar las tradiciones y el fervor religioso de la población.
La Semana Santa en Abancay es una experiencia única que combina fe, tradición y cultura. Es una oportunidad para reflexionar sobre la vida, la muerte y la resurrección de Jesucristo, y para vivir una de las tradiciones más importantes del Perú.
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